Una vez mas y ya son muchas, el paisaje desolador que queda después de un fin de semana en nuestros pueblos y ciudades es bochornoso y preocupante, papeleras volcadas con todo su contenido en el suelo, pateado y desperdigado a los cuatro vientos, papeleras que llevan anclajes de hierro sobre hormigon , lo que me hace pensar que se han prodigado bastante para poder tumbarlas, bancos arrancados de cuajo como si de un ciclón se tratara y deshechos, unos metros mas allá,arbolitos arrancados, cubos de basura, plantas de los jardines pisoteadas, pintadas, meadas y demas deposiciones, y una gran variedad de vomitadas que hacen el colofon perfecto para un lugar que unas pocas horas antes estaba en perfecta armonía y ahora es como si hubiera pasado una horda de animales salvajes en retirada, esto es lo que queda después de una noche de fiesta de nuestros jóvenes.
Yo que ya estoy en edad de no romper nada me pregunto ¿que es lo que toman?, no puede ser que con unos cuantos cubatas se pongan en ese estado salvaje agresivo y la emprendan con todo a golpes, ¿esas actitudes se manifiestan en su domicilio?, de ser asi existe un problema, grave problema diría yo y es lo de siempre, educación que es lo que diferencia esos otros tiempos a los de ahora, si, antes habia fiestas en cada localidad, guateques con alcohol y bancos, también habia papeleras pero habia un código de respeto por todos utilizado y era la educación y el respeto tan grande que habia, eso hoy día en un amplio sector de nuestra juventud se desconoce, decía Pitagoras filosofo griego en el siglo VI, Educad a los niños y no sera necesario castigar a los hombres. Las localidades ven como aumentan sus facturas por esas fechorias, y es una lacra que se ha instalado en nuestra sociedad, por eso hay que solicitar a nuestras autoridades mas diligencia en vigilar las propiedades de todos los ciudadanos y mejor disposicion en los turnos de vigilancia en los accesos a los lugares de las celebraciones, identificar a los causantes y hacer una investigación para que sean solo los culpables los que paguen y no se vuelva a cargar en el bolsillo de los contribuyentes los gastos ocasionados y lógicamente se repongan con rapidez los elementos dañados. Espero vuestras aportaciones y comentarios sobre este tema y todo de lo que quieran aportar.
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